miércoles, 23 de febrero de 2011

La rumbera niñez guatemalteca

La noticia de hoy es que, según una encuesta que no sé quién mandó a hacer ni con cuáles propósitos, los niños guatemaltecos tienen su primera relación sexual a los diez años y se toman la primera cerveza a los siete.

Al contrario del enfoque de los medios que publican esta "noticia" (alarma ante la pérdida de valores que sufre la juventud) mi reacción fue de la más sincera risa.

Esas evaluaciones meramente cuantitativas y técnicamente validadas arrojan datos (perdón por el lugar común pero me sirve por la relación con un vómito) que sin un análisis cualitativo solo llevan a conclusiones erróneas.

Lo que quiero plantear es: ¿a cuántos de nosotros no nos preguntaron en la adolescencia si éramos vírgenes y dijimos que no aunque fuésemos más puros que Hipólito?

Desconozco cómo se habrán llevado a cabo las encuestas, pero imagino que un centro educativo con los estudiantes rodeados por sus compañeros y la típica presión de grupo. Si a un adolescente de 17 años le preguntan a qué edad perdió la virginidad (que ya se da por sentado que la perdió) responderá, seguramente, que “¡Ufff, hace como cinco años!”. Ese dato nos lleva a sexto primaria con niños de doce años y, muy preocupados por la moral guatemalteca, los encuestamos para “comprobar los datos anteriores. Entonces les preguntamos lo mismo a estos niños y nos dirán que “ufff hace como dos años que tuve mi primera relación sexual” y entonces tenemos el absurdo dato de que a los diez años ya tienen relaciones sexuales aunque ni siquiera puedan eyacular ni sepan quitar un brassier (bueno, a esa edad les daría igual porque las niñas usan camisetas, ¿no?). ¡Solo espero que no encuesten a los niños de diez años y luego tengan que corroborar los datos con niños de Kinder!

Ojalá que las iglesias y grupos moralistas (que abundan en épocas electorales cual gemlin a media noche) tomen esto en cuenta a la hora de montar sus campañas contra el alcoholismo en primero primaria y para satanizar el condón en cuarto grado. Reflexión: por cuestiones de tamaño, ¿un niño de diez años puede usar un condón?